Por: Gustavo Guzmán
En la actualidad la República Dominicana lucha por sus recursos naturales, cómo es el río Masacre o Dajabón, por un desvío que se construye desde Haití, esto lo apoyamos como todo buen dominicano, lo que no estamos de acuerdo es en la forma en la que se ha cerrado toda la línea de comercio entre ambos países siendo una perdida monerataria de 1,200 millones de pesos hasta el momento o un poco más.
Las medidas fueron tomadas todas al mismo tiempo, una de ellas fue parar de dar visas que los ultimos 3 años van mas 300,000 mil, entre otras y obvio el cierre de toda la frontera y no medidas de forma escalonadas para ir presionando poco a poco, lo que me hace entender que existe una maniobra política y no de defensa nacional, pienso el drama de nuestros empresarios fronterizos, productores agricolas que hacen sus inversiones en base al comercio binacional.
Es claro que las medidas pudieron ser graduales y pensar en arbitros internacionales, según nuestros acuerdos internacionales. Lo que se necesita ahora es buscar una solución real a toda nuestra frontera por lo que sería interesante que el país solicite una mediación urgente de los organismos internacionales en base a la nuevas realidades de intervensión que tendrá en los proximos meses Haití, para buscar la mitigación de los efectos que tiene ya nuestra agropecuaria por una medida muy fuerte que pudo ser paso a paso, esa es la razón por la que muchos actores del sistema la entienden como un asunto electoral, por una posible reelección del Presidente actual Luis Abinader, que intenta apelar al nacionalismo dominicano, pero esas intenciones no pueden llevar a destruir toda una zona económica, lo que significa más pobreza de ambos lados de la frontera.
Es necesario que entendamos que apoyamos que la frontera debe seguir cerrada para temas migratorios, pero en temas comerciales es un duro golpe a nuestros empresarios fronterizos, es necesario poner a producir de manera urgente.
Evitemos la política y apostemos a medidas reales sostenibles en el tiempo para cuidar nuestra frontera.